Hace algunos días, un veterinario de Hermosillo, Sonora, compartió en su cuenta de Facebook una historia estremecedora.
Un perrito pug había sido llevado a su consultorio para que lo eutanasiara, simplemente porque había sufrido un accidente en el ojo y su dueño no quería pagar el tratamiento.
Un ojito lastimado
El veterinario, que se identifica en su cuenta de Facebook como Uhry Adib Lajud, cuenta que el perrito llegó a sus manos porque el dueño quería que se le aplicara la eutanasia.
El pug, efectivamente, estaba lastimado: un golpe había provocado que el ojo izquierdo se saliera de su órbita. Sin embargo, el problema se podía resolver con cirugía y el perrito tenía todas las posibilidades de continuar una vida de gran calidad.
El problema era que el dueño no quería pagar la cirugía.
El veterinario se negó a eutanasiar a un perro que no lo necesitaba y acabaron dejándoselo abandonado. El profesional lo bautizó como Morgan, le realizó la cirugía que necesitaba y se dio a la tarea de buscarle una nueva familia.
Afortunadamente, la búsqueda no fue muy larga y pronto el veterinario anunció que el perrito ya tenía una nueva familia.
¡Toda la suerte del mundo para Morgan en esta nueva etapa!
😍 Hola mi nombre creo que será Morgan mi dueño que no se cómo llamarle a ese humano me trajo a qué me durmieran 😢 ya que...
Posted by Uhry Adib Lajud Chairez on Friday, December 17, 2021