Snowshoe

Se le suelen reconocer las cualidades de sociable, dulce y cariñoso.

Las sesiones de juego diarias son una excelente manera de mantenerlo activo y de satisfacer su necesidad de ejercicio físico.

Es un gatito equilibrado, tanto activo como tranquilo, sabiendo equiparar agradablemente el tiempo y las ganas dedicadas a los juegos y a los periodos de reposo.

Es curioso y perspicaz, adora explorar su entorno para elaborar planes magistrales que lo lleven a lograr sus fines, salvarse de un lío que él mismo ha creado o, simplemente, salirse con la suya. Es un excelente alumno durante las sesiones de entrenamiento, ya que puede llegar a aprender a sentarse o a dar la patita cuando así se le ordene.

Por lo general, muestra un gran interés por la novedad. Existen diversos factores que influyen en la desconfianza de los gatos con desconocidos, incluyendo la manera en que han sido socializados desde cachorros.

Este gato puede adaptarse a llevar una vida más bien solitaria si sus necesidades de estimulación y actividades físicas son satisfechas. Sin embargo, la mayoría de los ejemplares de esta raza son muy sociables.

Numerosos gatos de esta raza son proclives a hacer uso de sus cuerdas vocales. Son muy parlanchines, por lo que mantienen “conversaciones” con sus humanos a través de dulces maullidos y trinos.

Siente una enorme necesidad de mantenerse activo, por lo que, además de jugar e interactuar con él, es necesario que cuente con juguetes para que pueda distraerse en solitario.

Siempre ávido de nuevos descubrimientos, este pequeño felino tiene la reputación de ser un explorador en potencia, por lo que habrá que vigilarlo cuando se abran puertas y ventanas.

Es un gatito activo, por lo que puede resultar algo glotón. Para mantener su peso ideal, servirá de ayuda servirle la comida en un bol interactivo, con el que tenga que jugar para obtener su pienso.

Si se socializa de manera apropiada al Snowshoe bebé, presentarlo de forma progresiva a otro felino en un ambiente provisto de lugares en alto, facilitará que ambos gatos se lleven bien.

Este gatito puede hacerse amigo de un perro sin problemas, ya que le encantan las interacciones sociales. Sin embargo, es necesario prever una presentación entre ambos de manera gradual, así como un medio de vida que cuente con lugares a diferentes alturas  para que el minino pueda refugiarse o aislarse cuando no le apetezca relacionarse con su amigo canino.

Es importante dedicar el tiempo suficiente para explicar a los niños las bases sobre el lenguaje corporal de los gatos. Para establecer una relación apacible para todos, los más peques del hogar deben aprender a respetar los límites de su felino, garantizando así horas y horas de juegos y caricias.

Es importante tener consciencia de que existen muchas variaciones en el carácter de los gatos  a pesar de que pertenezcan a la misma raza. El Snowshoe es sereno y activo al mismo tiempo, por lo que puede resultar un buen compañero para una persona que lleve un estilo de vida más bien tranquilo. Eso sí, su dueño debe poder asumir sus responsabilidades con el gato, ya que tendrá que jugar con él y mantenerlo activo en la medida de lo posible.