Prestar atención a la dieta de tu gato es muy importante, pero cuando se da el caso de una gata lactante, la alimentación debe cuidarse mucho más porque la recién estrenada mamá tiene que estar fuerte y sana para enfrentarse al nuevo reto de su vida: sacar adelante a sus cachorros comiendo bien y en un ambiente tranquilo en el cual no haya ningún cuadro de estrés que rompa la magia.
De la misma manera que hablamos sobre las pautas alimenticias de un gato bebé, ahora te damos una serie de consejos para que mimes a la reina de la casa con los mejores alimentos, esos que harán que tu gatita lactante se encuentre fuerte, sana y dispuesta a todo por sacar a sus retoños adelante.
''Una gata lactante necesita mucha atención''. Así de preciso ha sido el veterinario Juan Fernández cuando habló con Wamiz sobre este tema.
Alimentación de una gata lactante: pautas a seguir
1. Mucha agua
Dale mucha agua ¡y que esté fresca! Esto hay que tenerlo presente sobre todo las 24 horas posteriores a dar a luz. La razón no es otra el calostro de la gata. Este se produce acto seguido de tener a sus crías y es fundamental para dar de comer a los bebés.
2. El calostro
Este alimento, primordial para sacar adelante a las crías, contiene muchas vitaminas, proteínas y grasas para los gatitos. La madre tiene que dárselo de la mejor manera posible porque, además de amamantarlos con esta sustancia natural, les transmitirá anticuerpos.
3. Alimentos de calidad
Los piensos de calidad (aquí te dejamos algunas opciones) siempre deben estar en la hogar ya que darle a tu felina croquetas ricas en vitaminas y nutrientes que estén adaptadas a su peso y edad son la clave para que la gata recién parida coja fuerzas y alimente a los pequeños gatitos como es debido.
Tu gata necesita una alimentación especial en estos días de tanto ajetreo que le ayude a producir leche rica en nutrientes para que sus bebés se deleiten con ella a la par que se hacen mayores. Además de los piensos recomendados, los veterinarios -a tenor de las palabras de Fernández- aseguran que darle porciones de pollo cocido o atún de lata a la gata (de forma moderada, cada 2 ó 3 días) aportan un plus a su menú, energía a su vida de madre y fuerza a los pequeños.
4. Atención al peso
Recuerda que debes alimentar a tu gata con precaución y en ningún caso; la dejes engordar porque la obesidad conlleva serios problemas de salud para tu mascota.
Los expertos recomiendan que no fuerces a tu minina a comer ya que después del parto suelen perder el apetito.
5. Apuesta por las proteínas
Eso sí, incítala a ingerir alimentos con mucha proteína y ricos en grasas, ten siempre su comida lista y su agua fresca.
6. La higiene es primordial
La limpieza es un símbolo de calidad muy importante. Jamás le pongas a tu gata agua agua o comida sucia que desprenda olores. Además de producirle arcadas; en caso de que se la tome puede contraer alguna enfermedad o alguna bacteria que afecte directamente a su salud y a la de los pequeños gatitos.
7. Tranquilidad
No olvides que durante este periodo de su vida; tu gata está produciendo leche para amamantar a sus crías. Por lo tanto, cualquier cuidado es poco para que la mamá esté sana y se encuentre con fuerzas.
Es primordial saber que tu felina necesita tiempo para estar con sus retoños, mimos que la reconforten y tranquilidad porque finalmente tiene que disfrutar de la mejor manera posible de ellos y estar sana para llevar a cabo la difícil tarea de ser una buena madre.